Desde hace más de tres años, por
la festividad de Todos los Santos, vengo llevando unos claveles a los enclaves
donde arrojamos las cenizas de mi hermano Francisco y mi primo Ramón; hogaño me
ha acompañado Manuel, voluntario de Cáritas, que cada martes me ayuda, en la
entrega de alimentos a las familias beneficiarias. El ha hecho algunas de las fotografías.
en Las Cruces, las cenizas de mi primo Ramón |
Primero hemos ido a las Cruces,
en la ladera de la loma que hay detrás de la Ermita, entre jaras y encinas, están
impregnadas en la tierra, las cenizas de mi primo Ramón, el pidió a sus hijos viéndose
tras penosa enfermedad próximo a fenecer, que las trajeran allí.
en Valdemorales, mi hermano Francisco |
Después hemos ido hasta
Valdemorales, el pueblo de mis mayores y también el de mi hermano Francisco,
donde el viendo próximo su traspaso, al final de larga enfermedad, pidió a sus
hijos, que sus cenizas las esparcieran en esta localidad. Allí fuimos y en un
ribazo de la cuneta de la carretera que bordea el pueblo, entre retamas,
higuera y encinas, esparcieron las cenizas mirando hacia el comedido caserío,
del que sobresale la torre de su Iglesia.
Luego hemos visitado brevemente el
castillo de Montanchez y hemos comido en un bar de esta localidad, tras el café
y un breve recorrido por sus pintorescas calles y plazas, hemos regresado a Don
Benito.
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